miércoles, 16 de enero de 2013

¡Soy un energúmeno!


¡Soy un energúmeno!





 

¡Y si! ¿Quien no lo ha pensado a veces?



 



Ahora NoyAhoy se pondrá muy personal, y si alguien que lee esta entrada me conoce, por favor toma en cuenta que es mi alter ego el que escribe.



 



Empecemos desde el principio… ¿quien es NoyAhoy?



 



Bueno, les diré que NoyAhoy es una mujer, ni doña ni niña, que vive en un estado fronterizo de México, con un trabajo bastante fuera de lo común: ¡soy fayuquera!



 



Y confieso que soy un energúmeno porque de vez en cuando mis adorados clientes me sacan de mis casillas -  y pensando mas profundamente a la vez que intento respirar lentamente para volver a sonreír y responderle al cliente de la mejor manera posible- surgía una duda en mi interior: ¿les pasa que mientras mas años van cumpliendo su carácter va cambiando?



 



Es diferente al tipo de cambio de carácter de cuando pasas de puberto a adolescente (ese es un cambio bastante bueno), pero mi cambio actual no estoy segura de que sea para bien, porque ahora es mas fácil hacerme enojar.



 



Hay un defecto muy grande que tengo y creo que se va acentuando con el tiempo: No me gusta que me digan que no, y si me dicen que algo no se puede, hago todo lo posible (y hasta a veces un poquito mas) por salirme con la mía… supongo que tiene su lado bueno, pero a veces siento que me desgasto sin razón fija.



 



Pero así como ahora el molestarme/fastidiarme es más fácil, también hay algo que es más difícil: Llorar. 



 



La ultima vez que llore fue por ahí de Junio del 2010, y ni siquiera fue por un hecho propio, fue viendo la película “Amarte Duele”, ¿has visto esta película?  La situación entre ellos, como los separan sin comprender ese amor, la adicción de su hermana, etc.; es algo que me llega al corazón.



 



Lo que me deja mas intranquila es ¿Qué pasara el día que llore?  ¿Acaso llorare todo lo malo que me ha ocurrido durante estos años?   Ya estamos 2013 y recuerdo 5 hechos bastante fuertes que me marcaron durante ese lapso (posiblemente después te los platique)… sin embargo a pesar de (según yo) haberlos superado nunca tuve esa confrontación con el sentimiento para tirarme a llorar.



 



Bueno, y es que yo no se llorar acompañada, si hay una sola persona enfrente ¡no puedo llorar!  Recuerdo como un grupo de amigos me hacia millones de preguntas de cómo le hacia para ver la vida rosa, que porque ellos habían vivido conmigo momentos intensos y jamás me habían visto siquiera agachar la mirada o responder con furia.



 



¿Tú crees que es algo bueno?  ¿O prefieres sacar todos los sentimientos en el momento?



¿Qué crees que me pasara el día que yo llore?  ¿Te ha pasado algo similar?



 



Coméntalo, rolalo en tu Face, en tu Twitter y no olvides que el hombre no sabe de lo que es capaz hasta que lo intenta. 


★ ★ ★     NoyAhoy   ★ ★ ★




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